¿Quién hubiera dicho que alguien tan común y corriente como Dylan Skeen me daría algunas lecciones de la vida?
Mi opinión sobre:
La historia:
¡Hola lectores increiblemente sexys! ¿Cómo andan?
Sé que estuve un poco perdida estos días, pero debo decirles que no fue una gran semana para mí. Comenzando con el resfrio que me pegué este finde... estaba echa un zombie.
Les cuento que anoche terminé esta historia, la primera de Crónicas Gatunas.
Es taaan tierna. Esta es la primera palabra que me viene a la mente cuando pienso en esta historia sumamente adorable y realista, y con una visión del mundo bastante particular.
¿Y a qué viene esto? Pues verán, la historia está contada desde la perspectiva de Nina, una gatita muy curiosa y a quien le gusta observar todo desde la ventana de la habitación de Samy, su ama. Pero ella está especialmente curiosa por Dylan, el vecino de enfrente que se pasa el tiempo jugando al basket o bailando en su cuarto.
A medida que pasan los días ella va aprendiendo mucho sobre este chico, la relación que él tenía con Samy y sobre la complicada y sin-mucho-sentido vida de las personas.
Es una historia corta y ligera, pero muy realista y llena de reflexiones profundas que te hacen detenerte un momentito de la lectura para pensar. Desde la ventana es la muestra de que no necesitamos violencia o perversiones sexuales para lograr historias geniales y atrapantes. (Lo de perversiones se encuentra bastante por acá). ¿Saben qué? Simplemente léanla. No se van a arrepentir.
La protagonista:
Nina es una gata persa (adoro a los gatos peludos) muy sabia para su apenitas año de vida. Ella es algo chismosa, ya que le encanta espiar a Dylan y quiere saber qué pasó entre él y Samy.
En cuanto a los humanos, Samy es una adolescente norma: le gusta estar con sus amigas, sigue estando algo despechada por lo mal que terminó su noviazgo con Dylan, pero de igual manera lo comprende, y es super protectora con su gata, de eso ni hablar.
¿Y Dylan? Debo decirles que me encantó este personaje. Él vive con su padre alcohólico y debe cargar casi solo con la enfermedad de su madre; pero aún así está lleno de esperanza y vida.
Puntuación: