Cuando Melanie, uno de los pocos humanos salvajes que quedan, se ve capturada, está segura de que se enfrenta a su fin. A Wanderer, el Alma intrusa asignada al cuerpo de Melanie, le advirtieron sobre los cambios que implicaba vivir dentro de un humano: las emociones irrefrenables, la abundancia exorbitante de las sensaciones, los recuerdos demasiado vívidos. Pero había una dificultad que Wanderer no esperaba: la anterior inquilina de su cuerpo se niega a renunciar a la posesión de su mente.
Wanderer se dedica a explorar los pensamientos de Melanie, esperando descubrir el paradero de ese remanente de resistencia humana. Por su parte, Melanie llena la mente de Wanderer con visiones del hombre que Melanie ama: Jared, un humano que sigue viviendo oculto.
Incapaz de separarse a sí misma de los deseos de su cuerpo, Wanderer comienza a anhelar al hombre que le han encomendado desenmascarar. Cuando fuerzas externas obligan a Wanderer y Melanie a hacerse aliadas, ambas emprenden una peligrosa e incierta búsqueda del hombre que aman.
Mi opinión sobre:
El libro:
Este libro es sumamente original. Ciencia ficción romántica, eso es sorprendente. La autora de Crepúsculo, Stephenie Meyer, nos trae una novela distinta, atrapante y emocionante. Tal vez al principio puede ser algo lenta, pero luego da un giro y gana un ritmo rápido e intenso. Al leer nos encontramos tan perdidos como Wanderer y cada suceso es inesperado. La facilidad con la que Mayer puede explicar y transmitir sentimientos complejos y contradictorios es fascinante.
La novela incursiona una raza de alienígenas llamados Almas, quienes invaden la tierra y sus habitantes porque creen que los humanos son demasiado violentos. ¿Cómo verían otras especies a la raza humana? Wanda (apodo de Wanderer) nos lo muestra. Aquí yace la cuestión profunda de la historia: ¿Qué es ser humano? ¿Es sólo una especie biológica o algo más? Bueno, no me quiero poner filosófica… así que continuamos.
“No es el rostro, sino sus expresiones. No es la voz, sino lo que dices. No es cómo te sienta ese cuerpo, sino las cosas que haces con él. Eres tú la que es hermosa.”