Bitácora: ¿Qué chucha es esta nueva sección?

¡Hola, lunáticos! ¿Cómo andan?

A principios de año les comenté que quería comenzar a hablarles un poco más sobre mis novelas y proyectos en el blog. Y una forma que encontré de hacerlo es con una especie bitácora, aka entrada que nadie pidió y a nadie le interesa (? Una vez al mes o cada que me acuerde les traeré una entrada contándoles sobre mis proyectos en curso, ideas, reflexiones y más cosas radom que se meten en el proceso creativo.

En esta primera página de la bitácora quería contarles más o menos en las historias que estoy trabajando ahora. Darles un panorama. Pero, ¿por dónde empiezo?

A ver… Estas semanas pasadas terminé de re-subir mi novela Las canciones de Celestina que había editado y corregido en enero. La novela en sí ya está completa, solo quedan por subir algunos extras y sorpresitas para los lectores.

¿Y de qué trata? Pues, va de una estudiante universitaria llamada Celeste que, gracias a sus amigos, termina convirtiéndose en una locutora de radio famosa gracias a sus consejos amorosos. Aunque ella no puede descifrar sus propios sentimientos hacia su mejor amigo y hacia un compañero de trabajo. Si son amantes del romance new adult con su toque de drama y referencias musicales, o si les encantan los clichés, puede que les guste mi historia.

Otra historia que también terminé es Aether. Todavía no caigo que ya terminé de escribir esa historia y que lo hice sin caer en hiatus. Y no voy a negar que extrañaré escribirla y a sus personajes. Además de que me siento muy orgullosa del matete que armé para su worldbuilding con aliens, alquimia y más cosas bien locas.

La historia va de Lena, una chica que puede ver el aura de las personas y se ha criado en un ambiente un poco esotérico. Ella solo quiere ser una estudiante normal hasta que su archienemigo de la infancia aprese en su residencia universitaria para volver a hacerle la vida imposible. Esta vez sumando el hecho de que él es un alien perseguido por otros de su raza. 

Mucho salseo, un poco de romance, algo de acción y bastante comedia en solo veinticinco capítulos. 

Mientras que estas historias terminan, una nueva comienza: Mercucio amó a Teobaldo. Un romance un poco más oscuro de lo que suelo escribir y mucho más hot, también. Como su nombre da a entender, esta novela es un retelling de Romeo y Julieta centrado en estos personajes. Salvo algunas licencias creativas, esta historia se mantendrá fiel a la obra original y espero poder ahondar más en los personajes de esta historia tan leída y reescrita.

Las portadas me las hice yo solita, por cierto :3

Y el último aviso parroquial para dar. Es que volví a meterme en el NaNoWriMo.  Sí, el mismo reto que el año pasado dije que no volvería a intentar (lo hice en esta entrada)… Peeero. En abril y julio se hacen los Camp NaNo, retos más relajados donde vos elegís el número de palabras que querés escribir, no son obligatoriamente 50.000 palabras, y donde te juntas con otras personitas en una “cabaña” para participar. Todos los abriles lo intento con @LCBuenfil, @Sky_Black1999 y @ClavelV en una cabaña que llamamos Equipo Rocket (porque somos losers conscientes). Y este año no será la excepción. Lo que sí yo me puse una meta bajita de unas 20.000, lo justo para hacerme escribir unas mil por día y avanzar en Mercucio amó a Teobaldo (o incluso terminarlo). 

 Y bueno, eso ha sido todo el chisme por hoy.

Si les interesa esta sección, en mayo les traigo una nueva entrada contándoles cómo me fue con el NaNo. ¿Lo cumpliré o no? Hagan sus apuestas.