NaNoWriMo 2020: ¿Qué tan mal me fue?

¡Hola, lunáticos! Noviembre ha terminado y con él el NaNoWriMo, así que venga a lloriquear contarles cómo me fue.

Spoiler: No cumplí el reto.

Para quienes no lo conozca, el NaNoWriMo es un reto creativo anual (al igual que el Inktober y otros) que consiste escribir 50.000 palabras en un mes, ya sea de una o varias novelas, de cuentos o poemas. Lo que importa aquí es la cantidad de palabras y terminar el mes con el borrador de una obra.

Como casi cada año, yo me prendí al reto y, como cada año, no lo logré. Creí que con esto de la pandemia tendría el tiempo suficiente para escribir, y si me hubiera dado el tiempo. Pero entonces descubrí varias cositas sobre mi manera de escribir:

La primera tiene que ver con que el reto exige que sigas escribiendo sin editar lo que ya tenías. Tenés que mandarle si volver atrás. Y yo no puedo hacer eso. Para escribir una nueva escena necesito que lo que la anterior al menos tenga algo de forma, si no me estanco. 

El segundo problema fue el más grave: mi cuerpo no soporta escribir tanto y todos los días. Normalmente suelo escribir unas tres veces por semanas y escribo unas 1.000 palabras en cada sesión (puedo llegar a más si estoy inspirada, claro). Pero luego de estar escribiendo entre 1.500 y 2.500 cada día durante veinte días, mi muñeca no daba para más. Me agarró un dolor horrible en la muñeca y una jaqueca que me impedía siquiera acercarme a mi PC. Entonces fue cuando decidí que ese reto no era para mí.

Y lo último que descubrí fue que la historia que tenía pensada escribir durante el NaNo no me gustaba.

En un principio iba a empezar a trabajar en un proyecto llamado Annelie, una distopia que parecía una mezcla entre Shatter Me y El cuento de la criada. Pero luego me di cuenta de un pequeño detalle: no me gustaba el mundo que creé. Había trabajado varios años en él y sus detalles, intentando que tenga coherencia, pero no me gustaba. No me sentía cómoda en él. 

Pero me gustan tanto sus personajes que decidí empezar de cero, quizás cambiando la distopia por un mundo de fantasía; ya que las partes donde más insegura me sentía eran las que involucraban las mutaciones genéticas, la historia de cómo se llegó a ese mundo y cosas más rigurosas.

Pero no todo fue malo. A la par de Annelie iba escribiendo la novela que actualmente publico en Wattpad, Aether (una novela de ciencia ficción casi cómica con aliens, alquimia y una relación enemies-to-lovers), y gracias al NaNo pude avanzar mucho en ella. Y bueno, escribí unas 28.500 palabras, más de lo que escribí en otros NaNos. 😅 

Así que, en resumen, no fue un mal NaNoWriMo. Aprendí mucho de esta experiencia y, después de dejar descansar mis manitas, sigo con muchas ganas de escribir.

¿Ustedes conocían este reto? ¿Participaron en él este u otro año? 

¿Les gustaría que les cuente más de mis proyectos de escritura o de mis desventuras como cuasi-escritora?