Reseña: One Piece: Saga East Blue - Eiichiro Oda

Título: One Piece

Título original: One Piece

Autor: Eiichiro Oda

Volúmenes: 94 (en publicación)

Editorial: Ivrea

Anime: 930+ (en emisión)

 

Sinopsis:

One Piece relata las aventuras de Monkey D. Luffy, un joven que, inspirado en Shanks, un pirata que le salvó la vida, desea convertirse en el Rey de los Piratas y encontrar el tesoro conocido como One Piece, que pertenecía a Gol D. Roger. Antes de ser ejecutado, hace 24 años, este legendario pirata contó al mundo sobre la existencia de su tesoro. Esto dio inicio a lo que se conoce como "la Gran era de los piratas": innumerables piratas se dispusieron a buscar ese tesoro, causando grandes problemas al Gobierno Mundial. Luffy iniciará sus aventuras, reclutando amigos y nakamas que lo ayuden a cumplir su sueño.

Mi opinión sobre:

El anime: 

Hola, lunáticos. ¡Feliz día de amigo! Y qué mejor manera de celebrarlo en el blog que con una reseña de una historia que tiene el mejor y más alocado grupo de amigos de todos los mares.

Y sí, llegó un día en el que hice lo que nunca creí hacer: empecé a ver One Piece, el anime eterno. ¿Y saben qué? Lo estoy amando. 

One Piece casi no necesita presentaciones, es uno de los mangas-animes más famosos de las últimas décadas por varios motivos: su mundo extenso que nunca termina de explorarse, sus personajes unicos, su estilo de dibujo peculiar y, principalmente, por su larga extensión. 

Por suerte, su historia está tan bien estructurada que puede dividirse en sagas no muy largas (si One Piece fuera una serie de libros, las sagas comprenderían cada libro). Y así lo iré reseñando. Porque, la verdad, no sé hasta dónde voy a llegar a ver. Así que empecemos por su primera saga: East Blue, que compone los primeros 60 capítulos de anime y los primeros 12 volúmenes del manga.

One Piece arranca cuando Luffy, un muchachito de apariencia escuálida y algo tonto, emprende su viaje para ganarse el título de Rey de los Piratas, en un mundo donde la piratería pareciera ser una “profesión” bastante común. Para esto tendrá que cruzar un peligroso estrello de Grand Line y hallar un tesoro llamado One Piece que dejó el antiguo Rey Pirata escondido por allí. 

Obviamente, Luffy no podrá hacer este viaje solo, así que comienza por formar su tripulación. Y los primeros integrantes serán: Zoro, un temido cazarrecompensas y espadachín experto (y mi nuevo crush); Nami, una astuta ladrona que se dedica a robarles solo a los piratas; Usopp, un mentiroso con buena puntería; y Sanji, un chef absurdamente fuerte y enamoradizo. Juntos se enfrentarán a otros piratas terribles y a la Marine que imponen su poder en el mar de East Blue en su camino a la Grand Line.

"Niño o hombre, fuerte o débil, ¡nada de eso importa cuando estás en alta mar!"

Y esta es la primera cosa que me enamoró de One Piece: sus personajes. Son todos tan carismáticos, tan únicos que es imposible no encariñarte con al menos alguno. Cada uno de ellos carga con su pasado y con una visión del mundo propia, con convicciones férreas y metas fijas. Todos, hasta el más atolondrado, tiene un carácter fuerte y una determinación inquebrantable. Hasta los personajes más secundarios y los villanos están bien construidos. Es loco como a veces me decía “seguro que Luffy hará esto o Sanji dirá esto” y lo hacían. En muy pocos capítulos llegás a conocerlos tan bien que sabés cómo reaccionarán a cada situación. Y es que la trama no mueve a los personajes, sino que son los personajes quienes llevan la trama a su antojo.

Otra cosa que también me sorprendió es que, a pesar de lo burdo y tonto que es el humor, sí me hacía reír un montón, porque se sentía natural y, de vuelta, de acuerdo a la personalidad de cada personaje. Pero no todo es risas aquí pues, cuando llegamos a la historia de Nami, comprendemos lo cruel que puede llegar a ser este mundo y se nos introduce a temas que luego serán de gran relevancia para este: el racismo, el abuso de poder y la corrupción de la Marine (su gobierno).

 Pero este es un shonen y no tiene que faltarle las peleas, ¿no? Y qué peleas. Aquí tenemos a dos tipos de personajes: los que son fuertes a base de entrenamiento como Zoro y Sanji y los que obtuvieron poderes al comer las frutas del diablo que dan habilidades especiales y absurdas, como Luffy, que puede estirarse como si fuera de goma. Esto hace que cada pelea sea única y bastante loca, llenas de giros inesperados y estrategias inpensadas.

Para ir concluyendo, esta primera saga me mostró por qué One Piece es el rey indiscutido de los shonen, lo tiene todo: humor, acción y momentos que llegan al corazón, personajes que desbordan carisma y personalidad, y un mundo único y extenso donde todo está conectado. 

No sé hasta dónde llegaré, pero sin dudas quiero saber más de las aventuras de Luffy y sus nakamas.

El manga:

Solo le he pegado un vistazo al primer volumen del manga para ver el dibujo de Oda, su mangaka. Y puedo decir que me pareció (desde mi total ignorancia sobre dibujo) muy equilibrado y prolijo. Las páginas no se sienten muy cargadas, pero tampoco prescinde de fondos detallados. Y su estilo tan particular no es desprolijo ni descuidado.

Admito que estoy tentada a ir por el manga porque sé que avanzaría más rápido en la historia si la leyera, pero voy a esperar a leer otros pendientes antes de comenzar este.

El protagonista:

Ya les hablé un poco de la tripulación. Así que ahora quiero hablarles de Luffy. 

De pequeño, él admiraba a un capitán pirata llamado Shanks (mi otro gran crush de esta historia) que siempre iba al bar de su pueblo y le contaba historias de sus aventuras. Desde entonces Luffy sueña con convertirse en pirata y recorrer los mares hasta encontrar el One Piece, aunque no sabe muy cómo empezar.

Él es quien carga la mayor parte de la comedia por su completa falta de tacto al comunicarse y hacer lo que se le da la gana en cada momento. Este niño no tiene filtros. Y aun así podemos ver que es más perspicaz y empático de lo que parece. Además, a pesar de que desde el comienzo es super fuerte y parece casi invencible gracias a la fruta del diablo; esto también demuestra lo creativo que es durante las peleas y cómo saca provecho a su cuerpo de goma. En serio, es un personaje fácil de querer y con su carisma nos convence de que puede llegar a ser el Rey Pirata.

 

Puntuación:⭐⭐⭐⭐⭐