miércoles, 25 de septiembre de 2019

Reseña: Si el amor es una isla – Esther Sanz (Silence Hill #1)

Título: Si el amor es una isla
Autor: Esther Sanz
Saga: Silence Hill 1/2
Editorial: V&R


Sinopsis:
Dicen que una isla es el lugar ideal para perderse. Yo tuve que llegar al inhóspito Sark, un islote con quinientas almas en el canal de la Mancha, para encontrarme a mí misma.
Todo empezó una mañana gris de octubre cuando por fin conseguí que una embarcación me llevara desde la isla vecina de Guernsey. El mal tiempo había impedido que ningún ferry se aventurara en aquel mar revuelto desde hacía días. Finalmente logré convencer a un pescador, que salía a faenar temprano, para que me acercara a Sark. El trayecto me costó el sueldo de una semana, pero llegaba con dos días de retraso y temía perder el empleo incluso antes de empezar.
No fue hasta más tarde, sentada en aquel bote pesquero, con el chaleco salvavidas puesto y la cabeza entre las rodillas para vencer el mareo, que pensé en la posibilidad de perder algo todavía más valioso: mi propia vida.

Mi opinión sobre:
El libro:
Admito que tomé esta novela de la Biblioteca de mi ciudad solo por impulso y no creía que fuera a gustarme.
Pero al final me tuvo re enganchada y, aunque hubo cosas que me parecieron algo predecibles y clichés, me dejé llevar por la historia.
Esta empieza cuando, para poder mantener el tratamiento médico que necesita su padre, Luisa, una joven española, acepta un trabajo como doncella en una isla inhóspita de Inglaterra. Allí, ella y nosotros, nos encontraremos con personajes muy diversos, algunos carismáticos y otros que inspiran desconfianza. 
El prestigioso hotel Silence Hill es todo lo perverso por dentro como lo es bello por dentro. Allí Luisa tiene que acatar reglas vigentes desde el siglo andá a saber cuánto y también adoptar una vida de esos tiempos, pues en aquella isla todavía impera, de manera disimulada, un régimen feudal. Y el jefe de Luisa, Patrick Groen, es uno de los hombres más poderosos de allí, aunque casi nadie le haya visto la cara jamás. Sin embargo, eso no es impedimento para que Luisa se enamore perdidamente de él.
El romance se da durante casi todo el libro de manera platónica pues Luisa no sabe exactamente quien es Patrick, solo lo que él le muestra y lo que los demás dicen de él.
Esta novela toma mucha inspiración de La bella y la bestia y El fantasma de la ópera, por lo que podemos esperarnos un romance lleno de misterios y secretos oscuros. También, para mi sorpresa, es un libro cargadito de erotismo con un juego de amo y doncella. 
“No te parece demasiado castigo estar tan cerca de las estrellas y no poder tocarlas?”

Si el amor es una isla está llena de clichés, sí. Pero Esther Sanz los emplea de una buena manera y, junto con su bonita prosa, logra crear una novela entretenida y atrapante.

La protagonista:
De los personajes no quiero hablar mucho porque lo interesante es ir descubriéndolos de a poco, a través de los rumores y opiniones de los otros. Porque en esta novela nade es lo que parece y todos llevan una o más mascaras. Incluso Luisa.
Nuestra protagonista Luisa posee una curiosidad y un amor por el chisme que dejaría en vergüenza a Pandora. Su curiosidad (y mala suerte) es tanta que siempre termina donde no debería estar y la impulsa a hacer actos de lo más alocados. Sin embargo, no es un personaje que desagrade. Tiene un buena proporción entre sus virtudes y defectos.

Puntuación: ⭐⭐⭐

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